Seleccionar página

Mª VICTORIA

PSORIASIS PALMOPLANTAR

Mª Victoria • Psoriasis palmoplantar

Hace algo más de un año mis “últimos” problemas en la piel tuvieron un nombre: psoriasis palmoplantar. Tanto en las palmas de las manos, en las yemas de algunos dedos y varias uñas, como en las plantas de los pies y en los laterales exteriores empecé a tener enrojecimiento y picor con desescamación muy molesta. Se me enganchaba en las heridas la ropa al vestirme o desnudarme, al planchar la ropa se he hacían incluso heridas si no tenia precaución. Dormía con guantes y calcetines, para que las pomadas hicieran mayor efecto. Algunos días estaba de muy mal humor por las molestas, otros días eran más tranquilos. Tenía que aceptar una (nueva) enfermedad crónica que no es grave, pero sí limita mucho algunas actividades de la vida diaria, y provoca un malestar muy continuo que genera estados de nervios y ansiedad con los que hay que romper, porque eso aún empeora la situación. Incluso dejé de fumar en Navidades por ver si eso aliviaba la situación.

El invierno fue duro. Mi dermatóloga (fueron varias, hasta que fueron descartándose diagnósticos y especialistas) fue prescribiéndome diferentes cremas, preparaciones magistrales algunas, y pomadas, que durante unos días parecían hacer algún efecto. Durante tres meses estuve incluso con inyecciones de tratamiento(que tampoco surtió el efecto deseado), y acudí al reumatólogo (por posible artritis psoriásica) y al fisioterapeuta, porque las molestias parecían empezar a afectar también a articulaciones, cosa frecuente en personas con psoriasis. Después de varias pruebas, descartaron esa complicación.

Me consolaba pensar que la primavera aliviaría un tanto los picores y el dolor (ya empezaban a doler las heridas de los pies; las manos parecían “en carne viva”, con la piel pelándose constantemente), y que los baños de gua y sol mejorarían mi piel. Así que cada vez que pude (tres-cuatro días de vacaciones) fui a la playa. Algo mejoré, sí. Pero la vuelta a zapatos y calcetines era paso atrás. Llegó el verano, y la dermatóloga me habló de fototerapia con rayos UVA, y de nuevas inyecciones de tratamiento. Parecía candidata a estas últimas, pero es un tratamiento muy caro, así que intenté que los dermatólogos (varios) de la sanidad pública valoraran mi caso. Tras varias consultas, propusieron que siguiera probando otros métodos, porque mi caso no era “demasiado grave” para inversión tan importante (palabras casi literales): debía probar con fototerapia(sesiones de rayos UVA con una crema especial, durante un periodo prolongado, y con mucha constancia por mi parte). En esos momentos, descubrí casualmente una espuma de tratamiento de las placas, y mi dermatóloga estuvo de acuerdo con intentarlo también con este producto durante una temporada. Eso hice, en julio y agosto. Entre las vacaciones (tranquilidad), el agua y el sol, mejoré mucho.

En septiembre volví a la rutina, y la piel empezó de nuevo a quejarse. Inicié de nuevo la fototerapia. Llevo cerca de veinte sesiones, no mejora la cosa… Estoy a la expectativa de que aparezca algo que me alivie. Ya sé que esta enfermedad es crónica, que no es “grave”, que no se contagia… pero es muy desalentadora e incómoda. Aunque confío mucho en la química, y en la medicina en general… ojalá aparezca pronto “MI” solución.

María Victoria

Paciente con psoriasis palmoplantar con diagnóstico previo de dermatitis atópica con urticaria crónica idiopática

Tratamientos | Madriderma

 

Z

Dermatología clínica

Diagnóstico y tratamiento de enfermedades de la piel en adultos y niños

Z

Actualización y vanguardia

Profundo conocimiento y formación en enfermedades de la piel

Z

Honestidad y centralización en el paciente

Tratamiento riguroso y máxima atención a nuestros pacientes

Dermatólogo de urgencias

Atención inmediata en Madrid, sin necesidad de cita previa, estamos pendientes de ti

error: Content is protected !!
Abrir chat
1
Escanea el código
Hola 👋
¿En qué podemos ayudarte?